La Vida Zoe

En El estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. … Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia – Juan 1:4 y 10:10
Lo que también se puede muy bien leer: En El estaba zoe, y zoe era la luz de los hombres. … Yo he venido para que tengan zoe, y para que la tengan en abundancia. ZOE = LA CLASE DE VIDA DE DIOS.
Es la vida abundante, la vida zoe, la clase de vida de Dios, porque es no sólo la vida que conocemos en lo natural, es una vida sobrenatural que involucra la vida resucitada de Jesús, la que recibes en el nuevo nacimiento, al ingresar al Reino de Dios, en este Reino sólo existe la vida zoe. La vida natural sin Dios, es una vida muerta. Pero zoe es vida resucitada, que traspasó la muerte, que las ligaduras de la muerte no pudieron retener a Jesús en el infierno o en la sepultura, tuvo que resucitar por el poder del Espíritu Santo. Esa es la clase de vida abundante, resucita lo que recibes, gloria a Dios.
Jesús vino a darnos esa vida - zoe, vida eterna - zoe (Juan 3:16; Romanos 6:23) Esta vida eterna que El vino a darnos es la naturaleza de Dios (Juan 5:26) “El Padre tiene vida - zoe en Sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida – zoe en Si mismo”, el Espíritu Santo vivifica con esa vida zoe nuestros cuerpos mortales.
Con toda razón esta clase de vida en el hombre producirá cambios inmediatos en todas sus formas. De allí que defendamos fehacientemente que Dios y Su vida en nosotros no es una religión, no es un cúmulo de reglas morales; es vida, y la vida hace cambios. A alguien le dicen que va morir con ese cáncer que está acabando sus días, y llega el Sanador a Su vida, llega la medicina de Dios a Su vida, y todo cambia, puede levantarse, reír, correr, creer y entender que una vida llegó a su lecho de muerte, y de fin de días; un nuevo año, una nueva estación empezó para esa persona.
Es como cuando un preso de 20 años de pronto sale libre, el juez lo declara cumplió su condena, y/o milagrosamente es libre; entonces sale a la calle, y todo es nuevo, pero como reinsertarse a esa clase de vida, porque con lo primero que se encuentra es con la soledad, sin amigos, sin familia muchas veces, sin trabajo, y el único rincón quizás sea nuevamente debajo de un puente con drogadictos, con criminales, con rateros, es decir: eso también había allí adentro en la cárcel.
Pero qué diferencia tan marcada con un personaje, que aunque en la cárcel conoció a Cristo Jesús y recibió vida – zoe, vida eterna, la vida de Dios, saldrá y ahora afuera hay una familia nueva que lo espera, un hogar, una iglesia, que estuvo orando por él, y lo abrazan, qué importa si mató, si robó, si violó, si qué fue lo que hizo, SI YA DIOS LO PERDONO y lo recibió como un hijo. Así marca la diferencia abismal la VIDA DEL PADRE en nosotros.
Dios y Padre gracias por ese amor infinito Tuyo que me dio vida eterna en Cristo Jesús, El soltó Su vida justa por mi, y se llevó todo pecado, maldad, enfermedad, pobreza y muerte; para yo gozar de esa vida abundante; te amo Padre, te amo Jesucristo por libertarme, salvarme, te amo Espíritu Santo por tu poder para resucitar a mi Salvador y ahora ser el que me revela toda la verdad que encierra esa vida eterna.

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