La Cátedra de Moisés


En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos Mateo 23:2

Jesús hablando a la gente y a Sus discípulos sobre los fariseos y escribas enseñó: “todo lo que digan que guarden, guarden y háganlo; pero NO hagan conforme a sus obras, porque dicen y no hacen

Nuestro mundo está plagado de gente legalista que ordena y quiere que así se cumplan las cosas, pero ellos viven en libertinaje y en placeres. Hay hombres en la historia y actualmente, que someten a un país a sus locos ideales, y exigen que los demás lo cumplan; y/o los tienen platónicamente subyugados a ellos por su oratoria y su gran elocuencia; pero ellos son incapaces de creer y practicar esto en sus propias vidas.

Jesús no fue un político, ni un idealista, ni un platónico, El es el Cristo, el ungido de Dios, el Maestro, el Rabí real.

En el vrs. 4,5 dice: “Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; PERO ellos ni con un dedo quieren moverlas. Antes hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos en otra versión el vrs. 5 lo leemos así: “Todo lo hacen para que la gente los vea. Les gusta llevar en la frente y en los brazos porciones de las Escrituras escritas en anchas tiras, y ponerse ropas con grandes borlas”. Ellos quieren tener los mejores lugares y asientos en las reuniones; y que los hombres los llamen Rabí.

Jesús dice dos principios eternos importantes acá:

Primero.- “Pero ustedes no quieran que los llamen Rabí; porque UNO ES TU MAESTRO, el CRISTO, y todos ustedes son hermanos”

Segundo.- “No llamen padre vuestro a nadie en la tierra; porque UNO ES vuestro PADRE, el que está en los cielos”

Acá Jesús está sacando de un error a los fariseos y saduceos pero ellos no quisieron aprender, estaban traspasados de su religión, sus tradiciones, sus leyes, amaron más la ley que al Dador de la ley para que el bien de ellos y por un tiempo. No soportaron el cambio a lo eterno y a la salvación. Jesús vino a mostrarnos el camino al Padre, la relación estrecha con el Padre. Para los de Israel Dios era Jehová de los Ejércitos, el Dios de sus vidas, y el Dios de sus padres Abraham, Isaac, Jacob, el Dios de Moisés, el Dios de David; pero no tenían como muchos hoy la relación de Padre con el Dios verdadero.

Dios y Padre gracias porque en Jesús nosotros fuimos hechos aceptados por Ti, al ser limpiados por Su sangre preciosa, y El nos dijo: Yo soy el camino al Padre, y voy a Mi Padre y a vuestro Padre; El es el Rabí verdadero y eterno, a Quien Tú enviaste; gracias en el Nombre de Jesús.

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