El Justo por la Fe Vivirá


… Mas el justo por la fe vivirá – Romanos 1:17

Los peces viven en el agua, porque respiran por branquias, están perfectamente diseñados y habilitados para vivir en el agua, fuera mueren. Las aves están diseñadas para vivir en el aire volando. El águila vuela a grandes alturas conoce más las cimas de las montañas y las rocas que la tierra. Las bestias de los campos pueblan parte de la tierra, su comida está en la tierra, su modus vivendi es en la tierra.

El hombre fue diseñado para vivir en la tierra, puede estar en el aire si viaja en un avión, puede permanecer en el mar si está en un barco. Hasta acá hemos hablado de todo lo natural y la naturaleza.

Existe un mundo espiritual, así como este mundo tiene el aire para que haya vida y una ley de la gravedad; así el mundo sobrenatural o espiritual de Dios tiene un medio para funcionar y es la FE, los animales no viven por fe porque no tienen la oportunidad de ser justificados.

Es el hombre el único ser de todo lo creado, quien fue hecho a la imagen de Dios vive por fe. Dice la Palabra del Fabricante “el justo por la fe vivirá”. A veces no estamos conscientes como cristianos que este es el aire espiritual llamado fe que nos hace vivir. Hablando en forma de sustancia espiritual, esa sustancia se llama fe. Y la fe viene por el oír la Palabra de Dios. Y la Palabra es espíritu y verdad, es viva y eficaz; por eso la fe siempre es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Porque lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.

Parecería que cuando hablamos es pura palabrería, pero en verdad no, cada que hablamos estamos soltando la sustancia espiritual que crea, que hace nuestra atmósfera en la cual vivimos. Los pensamientos que fabricamos en la mente en base a todo lo que creemos, oímos, y aprehendemos es soltado o impreso por nuestra boca. Por eso es importante saber qué hablamos, qué decretamos, qué creamos para nosotros mismos, o para nuestros seres amados.

Estamos a finales del 2009, es imperante hacer un inventario de nuestra vida, desde nuestras palabras hasta nuestras actitudes y acciones, hábitos y estilo de vida en pleno. Es tiempo de vivir la Palabra para nuestra propia vida, y vivirla en el Ministerio de la Reconciliación que nos ha sido dado por Jesús. No nos conformemos, no estemos como inertes, hay vida, y tenemos la mejor calidad de vida del universo, es la vida que Jesús nos dio.

Tenemos al Espíritu Santo de Dios que nos vivifica, nos da poder, nos unge, y a través de nosotros opera con milagros extraordinarios, manifestaciones grandiosas y poderosas. No nos perdamos de vivir lo mejor de este tiempo por la fe en Jesucristo. Abraham, Isaac, Jacob, Moisés, David, Pedro, Juan, Pablo y muchos otros de los tiempos de la Biblia aprovecharon su tiempo diría al 200%, los grandes hombres y mujeres de los dos siglos pasados, sobrepasaron toda expectativa del Mover del Espíritu Santo, cuánto más nosotros que estamos al final de los finales, ante la venida de Jesús, Quien viene por una Iglesia hermosa, porque nuestro trabajo no es en vano, nuestro anhelo y trabajo es para que millones de millones entren al Reino de Dios.

Antes de ayer las noticias nos comunicaron sobre el Hno. Oral Roberts de 91 años quien por la tarde del día 15.12.2009 se fue al cielo, en donde se encontró con su Salvador, Su Padre celestial, la tremenda e inmensa nube de testigos los héroes de la fe, y así mismo en esa nube de testigos su amada esposita Evelyn con quien siempre quiso volver a estar. Amados me impresiona el inventario que Hno. Oral Roberts haya presentado a nuestro Señor Jesucristo de todos los millones de hombres y mujeres que lo saludaron en el cielo, tanto que recibieron a Cristo, como que fueron sanados, restaurados en su matrimonio, en sus finanzas, y cuantos milagros hoy pueden estar contando y recordando, con toda la gloria y la honra para nuestro Rey y Señor. ¿Qué piensas de ti mismo? ¿Cuál quisieras que sea tu inventario? Mas el justo por la fe vivirá!!! Nunca del pecado, nunca del temor, nunca de la condenación, sino por medio de la fe que viene por la Palabra escrita que sale de la boca de Dios; El siempre dirá lo mismo.

Dios y Padre gracias por Tu Palabra cargada de fe, gracias por el don de la fe, gracias por los días que nos quedan para que millones de gente puedan convertirse en gente de fe, de justicia, de avivamiento, de regocijo, con un futuro brillante; gracias en el Nombre de Jesús.

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