Jesús vio la fe de ellos
Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo tus pecados te son perdonados – Marcos 2:5
Jesús estuvo predicando la Palabra, cuando trajeron a un paralítico cargado por cuatro amigos, pero ya no cabían ni aun a la puerta. Ellos vinieron con una meta, “Jesús sana, nuestro amigo sale como nuevo de acá”. Cuando tú tienes una meta, no hay Mar Rojo, ni muros de Jericó, ni Río Jordán, ni distancia, ni techo que te detenga de alcanzar tu meta, y mucho más si es que Jesús está involucrado.
Observen que no era la casa de ninguno de los cuatro, era de alguien, y de seguro caminaron en “es por fe no por vista” porque no vieron el techo sólo su fe los instó e hizo que descubrieran el techo de la casa, e hicieran una abertura donde Jesús estaba predicando y sanando. Esta es la clase de fe que maravilla a Jesús, porque mira la fe del Padre, y nuestra fe, y al ver que es de la misma clase, sin diferencia, sin temor y dudas, entonces Jesús se maravilla, y en este ambiente sobrenatural lleno de fe, cualquier señal, prodigio, milagro y maravillas pueden suceder a favor del hombre.
Y dice “al ver Jesús la fe de ellos” ¿la fe se ve? Claro que sí, mucho más Jesús, conoce la fe, tal como tú conoces que es una manzana, o una sandía, nadie te dirá lo contrario, esto es en lo natural. En la Iglesia es tan tremendo ver quien jala la Palabra llena de fe para su vida, y en ese instante esa vida recibe y recibe, es en el ambiente de fe, de poder, de autoridad, que lo sobrenatural sucede. Por eso es importante que donde se predica, o enseña la Palabra, donde la sanidad está fluyendo, tú te muevas en ese nivel de fe y recibas.
Qué bueno que ahora no hay cosa alguna que te separe de Jesús, ni la multitud, ni una casa, ni un techo, El vive en ti amado, o en el que aún no vive, y pregunta ¿qué es esto? Bien te diré que puedes leer Romanos 10:9-11 y declarar entonces con tu boca que Jesús es tu Señor, y creer en tu corazón lo que la Palabra dice, y serás salvo y justo. Entonces puedes decir Jesús vive en mi, y no hay barreras hasta la eternidad, mantente en la Palabra, estudia, medita en ella día y noche, y entonces harás prosperar tu camino y todo te saldrá bien. Asiste a una iglesia y plántate allí, oro que sea una iglesia de buena Palabra no adulterada y que te edificarás y conocerás Quién es Jesús.
Y bueno como siempre algunos escribas por allí sentados, usando asientos que otros sí necesitaban, pensaban maldades, como “blasfemias dice” en su ignorancia e incredulidad, no querían entender ¿quién era Jesús? Pero en fin, estos cuatro usaron bien su fe. Y aquí Jesús les enseña algo simple y básico, que El puede perdonar pecados {desatar a la gente del yugo del pecado que lo mantiene atado a Satanás, y desatar a la gente del yugo de la enfermedad y la dolencia} lo uno es netamente espiritual, se ve en el gozo y la libertad que toma la gente, pero de pronto éstos escribas podrían decir, bueno se hacen, están actuando; mas, ver a un paralítico que se levanta, eso era diferente. Pero saben ni así creyeron, porque el principio de todo lo sobrenatural es creer que Jesucristo es, y que es tu Señor.
Mas vayamos a los que vieron y creyeron, glorificaron a Dios. Que tú seas uno que es de esta multitud de los creen, y aprende para orar por otros, para enseñar la Palabra a otros, y que muchos sean sanados y puedan dar la gloria a Dios.
Dios y Padre gracias por la Palabra de fe, de salud, de bienestar, de paz, porque tiene poder, encierra fe para que lo sobrenatural sea visto en este mundo natural; gracias en el Nombre de Jesús.
Posted in: on 21 de septiembre de 2011 at en 1:00 a. m.
