Cartas abiertas

  Siendo manifiesto que sois cartas de Cristo, expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo … – II Corintios 3:3
Algo muy importante que debes saber es que eres CARTA DE CRISTO, esta es una declaración y definición del amor de Dios para tu vida, desde hoy y para siempre tienes el gozo de saber que como carta de Cristo ya expedida, ya enviada, todo el mundo puede leer en ti: la potencia del Evangelio, el poder de las inescrutables riquezas del Evangelio, puede leer en ti el significado del amor de Dios, lo que la fe es, puede leer sobre paz y seguridad, puede leer en ti todas las riquezas del Reino de Dios y encontrar en su lectura que Dios suple todo lo que falta al lector conforme a Sus riquezas en gloria, puede leer la cantidad de medicina disponible para su vida, puede leer la declaración exacta de libertad y cómo despojarse de enfermedades y dolencias, puede leer de santidad, justicia, sabiduría, verdad y vida en abundancia para su propia vida. Y todo lo que lea irá causando efecto en su vida. ESO ES SER CARTAS ABIERTAS.
El apóstol Pablo inspirado por el Espíritu Santo explica en toda riqueza acá lo importante que somos veámoslo:
No usamos de cartas de recomendación
Nuestras cartas son ustedes
Escritas en nuestros corazones
Conocidas y leídas por TODOS los hombres
Ustedes son cartas de Cristo
Expedida por nosotros
Escrita NO con tinta
Sino con el Espíritu del Dios vivo
No en tablas de piedra
Sino en tablas de carne del corazón
Y acá viene el sello de humildad y sencillez que siempre debemos mantener y mostrar en nosotros: “no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios” vr.5
Si observan bien, entenderán lo que dice un gran amigo mío “la Biblia es tan simple, que se necesita ayuda para no entenderla”. Y a la verdad ustedes tienen la sabiduría de Dios, simple y abundante, rica y embellecedora.

Dios y Padre gracias por habernos hecho esas cartas preciosas – cartas de Cristo, tendríamos suficientes motivos para estar orgullosos, pero en Ti todo es diferente y como diríamos por su derecho no por su revés, es de gozo y alegría agradecerte por la vida abundante, por la felicidad y seguridad abundante, por el Espíritu Santo que nos ha sido dado; gracias en el Nombre de Jesús.

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