Personaje - El buen Samaritano - parte 1

¿Haciendo qué cosa heredaré la vida eterna? ¿Y quién es mi prójimo? – Lucas 10:25, 29
Vamos ahora con un Intérprete de la Ley que quiso probar a Jesús, que tal intérprete en verdad. Dijo éste: Maestro ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna?. Con la gracia de Dios y el poder del Espíritu Santo quisiese marcar con toda sinceridad y amor en ustedes el gran significado de “herencia” y “ser heredero”. ¿Se dan cuenta que los judíos nacen pensando en herencia? Viven pensando que la herencia es suya. Que sin herencia no hay vida. Porque el punto central de la pregunta para con Jesús es “heredar la vida eterna”. No era una pregunta del momento de una u otra forma, este hombre vivía para obtener y heredar la vida eterna.
Mientras que en nuestros tiempos “no hay sentido de lo que es herencia, ni vida eterna, menos de prójimo” Fui a ver la película “2012” me dijeron que salían con las caras de susto. Amados a esta generación como en la de Noé, de Lot en Sodoma y Gomorra, y otras muchas generaciones, viene a mi mente la generación de Jesús (los judíos, Herodes), los Romanos, la Invasión de los Bárbaros en España, la generación de Hitler, los Rusos con su comunismo; y ustedes pueden añadir más. No les asusta nada, por curiosidad en la sala que vimos la película pregunté a algunos después de observar sus expresiones, ¿Qué tal la película? Contestaron ¡huuum, buena! Y sonrieron. Más les impactó la de Mel Gibson, pensé, las penas y dolores los emocionan, para llorar o reír, pero también por un instante, y por las Escrituras sabemos que ya sucedió, y cómo este sacrificio nos da a conocer el futuro, y a dónde nos lleva la vida eterna. Esta generación y las venideras son como los lugares de “comida al paso” “rápido, que me voy” no saben a dónde, pero viven apurados.
Este varón preguntó y Jesús respondió: “¿Qué está escrito en la ley? ¿cómo lees? Y él le respondió muy suelto de huesos: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo” Jesús muy sabio le respondió algo que termina en la tierra “Bien has respondido; haz esto y vivirás” Pero él había preguntado algo eterno: ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna? De alguna manera este Intérprete de la ley sabía que en la vida eterna, no habría de estar solo, y no le fue contestada la pregunta de la herencia. Y vuelve a preguntar queriendo justificarse en algo que no tenía respuesta certera, ni verdadera, para que Jesús le diga, en lo que no sabes, no te preocupes “Mi Padre te la pasará por alto” huy, este no es un examen de colegio ni universidad.
Y es aquí que Jesús da Su brillante enseñanza llena de principios, valores y verdades grandiosas.

Dios y Padre gracias, Jesús nos enseñó a ser un prójimo real, al amarte a Ti, y amar y servir a la humanidad que creaste; gracias en el Nombre de Jesús.

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