Don de Profecía

… a otro, profecía – I Corintios 12:10
El Don de Profecía son palabras sobrenaturales para: edificar, exhortar y consolar dadas por Dios en lenguas desconocidas. La profecía proviene de la mente del Espíritu Santo hablando a nosotros en forma sobrenatural.
El Don de Profecía no es para:
* predecir el futuro,
* ni es usada para dar dirección,
* ni para predicar,
* ni para corregir, o disciplinar
,
El Don de Profecía es para:
Edificar: promover el crecimiento espiritual, instruir, mejora espiritual; edificará a la Iglesia, al débil espiritualmente, removerá el temor
Exhortar: ánimo, urgir, aconsejar, advertencia seria (separación del mundo por ejemplo, llamado a consagración, santidad)
Consolar: consuela con ternura, da fortaleza y esperanza. Incluye el liberarnos de angustia, dolor, persecución y sufrimiento, Dios trae sanidad a los corazones; trae libertad a las personas de recuerdos pasados, tristezas y depresión.
El Don de Profecía es para que toda la iglesia pueda profetizar, estamos hablando bajo el DON DE PROFECIA, no es que será usado todo el tiempo, es cuando el Espíritu Santo quiere. El apóstol Pablo anima a toda la Iglesia para que profeticen bajo el don – I Corintios 14:1. Después definió con simplicidad lo que es Don de Profecía: “Pero el que profetiza habla a los hombres, para edificación, exhortación y consolación. La respuesta a la pregunta ¿son todos profetas? Es ¡NO! –El que es usado en el Don de Profecía, NO ES un Profeta (de los 5 dones ministeriales que Jesús dio al ascender al cielo – Efesios 4:11) quien todo el tiempo enseña, predica y da profecías en el oficio de Profeta.
Somos guiados por el Espíritu Santo, estamos en el Nuevo Pacto, no andamos buscando que alguien usado en el Don de Profecía, o con el Ministerio de Profeta, nos de Palabra para dirección, para tomar decisiones, buscamos en la Palabra, y la guía del Espíritu Santo, tienes discernimiento, por lo tanto, nuestra búsqueda es de Dios, no búsqueda de hombre alguno.
Dios y Padre gracias porque cada miembro del Cuerpo de Cristo tiene una función en el Reino de Dios, somos como una sinfónica que todo instrumento da su sonido y producen la armonía y la música, pero no tocan lo que quieren, sino lo que está escrito en la partitura, así nosotros tenemos la Palabra de Dios, la mejor partitura musical del universo; gracias en el Nombre de Jesús.

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