No te debilites en la fe
Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi 100 años), o la esterilidad de la matriz de Sara – Romanos 4:19
La Palabra dice de Abraham que: “su fe le fue contada por justicia”, y cuando la fe y la justicia se unen, cosas sobrenaturales suceden sin ningún esfuerzo humano. Esta debilidad es como cara y sello. Por un lado es como la debilidad física, sin ánimo, sin fuerzas. Por otro lado es ser débil y caer en pecado, cederse a las maquinaciones, tretas, artimañas del enemigo. NO NOS debilitemos, midamos nuestra fuerza, nuestro tiempo, nuestro recorrido, nuestro pensar, nuestra meta. No decaigamos inútilmente y entremos en la red enemiga. Fortalécete en tu Dios quien te da fuerzas más que de búfalo, es tu escudo, te sostiene con la diestra de Su poder y de Su justicia.
Andamos en este mundo a donde no pertenecemos, y andamos por fe no por vista; llamando las cosas que no son como si fuesen; quien puede ver lo invisible, puede hacer lo imposible.
Existe definitivamente nuestro mundo sobrenatural, no es difícil ver lo invisible, en Hebreos 11 dice de Moisés que tenía la mirada puesta en el galardón, y que se sostuvo como viendo al invisible. Esta verdad “que escogió no gozar de los deleites temporales del pecado”, lo apartó de debilitarse en la fe. Tal como Moisés, en esta galería de los héroes de la fe del capítulo 11 de Hebreos, encontramos la clave o llave de cada varón y mujer fuerte y valiente, que pelearon la buena batalla de la fe, corrieron con paciencia su carrera puestos los ojos en Jesucristo el autor y consumador de su fe.
Por la fe Abraham, siendo llamado obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia. Por la fe Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir. Todo lo que leemos aquí de la fe, es el estilo de vida que Dios espera que vivamos, por cuanto nos ha fortalecido para tener la fuerza para vivir como gente sobrenatural.
Todos estos héroes de la fe, y cuanto personaje encontramos en la Biblia tuvieron una vida real, muchos de ellos con circunstancias difíciles, con pérdidas, maltratos, cárceles, persecuciones, etc. Tenemos que sacar fuerzas de debilidad, hacernos fuertes en batallas, y poner en fuga ejércitos enemigos.
El apóstol Pablo escribió desde la prisión: “regocijaos, regocijaos, otra vez digo regocijaos” “fortaleceos en el Señor y en el poder de Su fuerza”. Jesús nos dijo: “Toda potestad me ha sido dada en el cielo y en la tierra, por lo tanto ID …” Quien sostiene todas las cosas con la Palabra de Su poder nos dice esto. Y dijo también: “Y recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos …” Un testigo real hace por la fe todo lo que hizo Su Maestro, y aun mayores cosas harán, dijo Jesús.
Fortalezcámonos en el Señor, más Palabra más fortaleza menos debilidad, más poder del Espíritu Santo en acción, menos cobardía y temor.
Dios y Padre gracias por ser Tú la fuerza de nuestra vida, nos diste aliento de vida, Tu vida misma; gracias en el Nombre de Jesús.
Posted in: on 20 de diciembre de 2010 at en 2:00 a. m.
