Espíritu Santo - parte 2


Pero cuando venga el Espíritu de verdad, El os guiará a toda la verdad; porque no hablará por Su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo Mío, y os lo hará saber. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de los Mío, y os lo hará saber – Juan 16:13-15
Podemos ver cómo la persona del Espíritu Santo nos guía a la verdad, y siempre el Padre, el Hijo y El están de acuerdo en toda la guía a los hijos de Dios. Vemos para con Pedro Hechos 5:3 “… para que mintieses al Espíritu Santo … “ 10:19 “Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí tres hombres te buscan”.
Veamos a Pablo cómo andaba con el Espíritu Santo en equipo, buscando que saber qué piensa el Espíritu Quien lo guiaba a toda verdad en Hechos 11:12 “Y el Espíritu me dijo, que fuese con ellos sin dudar. .. “ 13:4 “Ellos entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, …” 15:28 “Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias” 6:6 “Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la Palabra en Asia” 6:7 “… intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió
Vemos al Espíritu Santo que habla, envía, tiene opinión, prohíbe, unge los ministerios; nos dice las cosas que van a venir, como a Cornelio y a Pedro a cada uno por su lado. El Espíritu Santo es fiel. También da testimonio Hechos 20:23 “Salvo que el Espíritu Santo todas las ciudades me da testimonio, diciendo …”. Vr.28 “… que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la Iglesia del Señor, la cual El ganó por Su propia sangre”.
La persona del Espíritu Santo es como toda persona que opera, ejecuta. Recuerden siempre esto que los muchachos cuentan, en cuanto a que en la escuela les pegaban duro en las peleas, pero si ellos veían venir a su hermano mayor, fuerte, osado, decidido a defender al menor; entonces este menor entraba en la lucha y decía, ahora dale, dale, para que veas lo que te sucede, como el otro estaba de espaldas, no sabía lo que le iba a suceder… y quizás diría en su mente que le pasa a este chiquitoso que ahora está muy aguerrido; era porque veía venir al hermano en su defensa. Otro peleaba y él era el ganador, porque no volverían a meterse con él.
Pues así y mucho mejor es el Espíritu Santo, porque el hermano no iba a andar pegado al chiquitoso, tenía que seguir su rumbo, mas el Espíritu Santo estará con nosotros hasta el fin; y nadie ni nada nos podrá hacer frente.
Jesús amado gracias porque dijiste que no nos dejarías huérfanos, gracias porque siempre has hecho y haces lo que nos conviene, y una importante decisión fue enviar al Espíritu Santo, y dijiste que nunca nos dejaría que siempre estaría con nosotros, y así es.

Espíritu Santo - parte 1


Pero Yo os digo la verdad: Os conviene que Yo me vaya; porque si no me fuere, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere os lo enviaré – Juan 16:7
En Joel 2:28 el profeta Joel profetizó: “Y después de esto derramaré Mi Espíritu sobre toda carne …” Jamás Dios hace algo sin un propósito, claro está, Dios Padre siempre quiso que gocemos lo sobrenatural; y esto es sólo por Su poder, para unción, para profetizar, para soñar Sus sueños.
En Lucas 3:16 “Respondió Juan … Yo a la verdad os bautizo en agua … El (Jesús) os bautizará en Espíritu Santo y fuego”. En el vr. 22: “Y descendió el Espíritu Santo sobre Jesús en forma corporal, …” 4:18 dice: “El Espíritu del Señor está sobre Mi. Por cuanto me ha ungido para …”
El Espíritu Santo es el poder, la unción, la potencia, necesaria para ejecutar todo lo que la Palabra de Dios requiere se haga en la tierra, a través de Su Reino y sus reyes y sacerdotes.
En Hechos 1:4-5, 8 “… sino que esperasen la promesa del Padre … mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días” “pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos … hasta lo último de la tierra
Recuerdo bien cuando el Espíritu Santo me enseñó que por tiempos el hombre ha enseñado sobre El, como paloma, como viento, como lenguas de fuego, y la Palabra lo dice, y lo enseña para que el hombre aprenda, pero también debemos aprender, que El es una persona de la Deidad, y que al no ser revelado esto, nos perdemos de reconocerlo, amarlo, recibirlo conocer tanto Su persona como Su obra.
Ese día cambiaron muchas cosas y asuntos en mi vida personal, pero al enseñar esto en Oasis también cambió la vida de la Iglesia, y comenzó el Espíritu a ser Quien es para todos nosotros, la Persona del Consolador, el Consejero, el Guía fiel, Aquel que Jesús dejó frente a la Iglesia para revelar la Palabra, para ser el Maestro, “para darnos espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Jesucristo, Quien es la Palabra, el Verbo; alumbrando los ojos de nuestro entendimiento, para que sepamos … “ Efesios 1;16-17
Y las más de las veces ni sabemos definir o reconocer la persona del Espíritu Santo, me gusta tanto cómo Efesios 1:19-21 lo define y lo da a conocer: “Y cual la * Supereminente *Grandeza de * Su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del *Poder de *Su Fuerza. La Cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos, y sentándole a Su diestra en los lugares celestiales, sobre todo …” ¡Oh, Padre, qué poder!!!
E l Espíritu Santo es el poder, es la potencia, es la unción, es el Pan de los hijos, es la fuerza que resucitó a Jesucristo levantándolo de las partes más bajas de la tierra y lo sentó a la diestra del Padre, es una de las Personas de la Deidad.
Espíritu Santo amado, gracias por ser tan fiel a lo que nuestro Señor Jesucristo te encargó, y te agradecemos que nos ayudas, nos consuelas, nos aconsejas, nos revelas, nos cuentas todo lo que el Padre y el Hijo hablan de nosotros, y es más nos das a conocer lo que va suceder, gracias en el Nombre amado de nuestro Señor Jesucristo.

Jesucristo - parte 4

Y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para la gloria de Dios Padre – Filipenses 2:11
Han habido oportunidades en que el sólo hecho de declarar Jesús, Jesús, Jesús, sobre una zona en mi cuerpo afectada por el dolor, o por situaciones difíciles en la vida, este Nombre me ha desatado de todo mal; ante este Nombre no hay enemigo que quede en pie, tiene que huir.
Este Nombre Jesús, es el Nombre del Hijo amado de Dios, en Quien el Padre toma complacencia, y cuando Jesús vive en ti, entonces el Padre también toma complacencia en ti, porque fuiste hecho acepto en el Amado.
Pedro dijo: “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”; qué tal revelación no de carne, ni sangre, sino de Mi Padre (dijo Jesús) que está en los cielos”. Reconozcamos la persona del Hijo de Dios, amados una cosa es creer en un espíritu tipo fantasma, y sabemos que Dios es Espíritu, pero no fantasma, y entonces otra creer en la persona del Padre, o la persona del Hijo, o la persona del Espíritu Santo.
Tu puedes hablar a un pedazo de madera por tallado que esté, o a un pedazo de oro o plata tallados, pero nada sucederá; en cambio hablas a Jesucristo, estás hablando con una persona divina, que ha prometido escucharte y responderte; siempre te dirá es Mi privilegio.
De qué forma lo toma Jesús, pues estás hablando de tu espíritu a Jesús quien es Espíritu pero tiene un cuerpo glorificado, como lo tendrás tu un día; recuerda que el fue Hombre verdaderamente; El vive en ti y está en los cielos, porque eres espíritu por excelencia puede suceder esto; dice Efesios 1:10 “De reunir todas las cosas en Cristo … así las que están en los cielos, como las que están en la tierra”. Están reunidas en Cristo, y El vive en ti; que recibas sabiduría y revelación, y los ojos de tu entendimiento sean alumbrados, para que sepas lo que has recibido.
Cuando tu entiendes plenamente que Jesús es Señor, entonces entiendes la forma en que tu también puedes señorear, en Génesis Dios Padre bendijo al hombre diciendo: “Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y SEÑOREAD …” sobre todo lo creado. Mientras alguien no tiene a Jesucristo en su vida, sufre la consecuencia que Satanás es el dios y señor de este mundo, Adán lo coronó como tal, pero cuando sales de ese señorío de tinieblas y entras al Señorío de la luz de Jesús, tu puedes señorear como El lo hace, Su Reino es Reino de luz y es tu Reino ahora, y el Rey vive en ti, El Señor vive en ti.
Señorea tú con confianza, en la confianza y la seguridad que Tu Señor Jesús te da, y en la seguridad que vive en ti. Mientras no veas a Jesús como la persona divina del Hijo del Dios viviente, no es fácil, pero de ahora en adelante, esto es pan comido para ti. El que es señor, no tiene temor, no tiene culpa de nada, no acepta la maldad, señorea y gobierna conforme a los principios de su Reino, y agrada a su Señor, y su gozo es estar sometido a la autoridad de su Señor, porque El es la fuente de esa autoridad inherente ahora a quien es señor en la tierra y sobre todo lo creado, su labor es sujetar a Satanás bajo sus pies, porque esta bestia sufre de amnesia y olvida que tu eres un más que vencedor, pero la Palabra en tu boca se lo recordará siempre.
En la cruz Jesús clavó todo decreto que este malvado tenía contra nosotros, y en su cuerpo en el madero sufrió toda maldición para nosotros ser libres para reinar como reyes, y señorear como señores, y lo más hermoso alabar y adorar a nuestro Dios y Padre, a Jesucristo el autor de eterna salvación, autor de la vida, y autor y consumador de la fe; y al Espíritu Santo; porque tanto el Hijo como el Espíritu Santo le dan toda la gloria al Padre.
Jesús amado, hay un cántico que dice: “hay momentos que no deberían terminar, hay segundos que debían ser eternidad” así es cuando entendemos Tu presencia y Tu gloria es tan palpable, entonces conocemos de Tu Señorío y Tu Reinado de luz y de verdad.

Jesucristo - parte 4


Y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para la gloria de Dios Padre – Filipenses 2:11
Han habido oportunidades en que el sólo hecho de declarar Jesús, Jesús, Jesús, sobre una zona en mi cuerpo afectada por el dolor, o por situaciones difíciles en la vida, este Nombre me ha desatado de todo mal; ante este Nombre no hay enemigo que quede en pie, tiene que huir.
Este Nombre Jesús, es el Nombre del Hijo amado de Dios, en Quien el Padre toma complacencia, y cuando Jesús vive en ti, entonces el Padre también toma complacencia en ti, porque fuiste hecho acepto en el Amado.
Pedro dijo: “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”; qué tal revelación no de carne, ni sangre, sino de Mi Padre (dijo Jesús) que está en los cielos”. Reconozcamos la persona del Hijo de Dios, amados una cosa es creer en un espíritu tipo fantasma, y sabemos que Dios es Espíritu, pero no fantasma, y entonces otra creer en la persona del Padre, o la persona del Hijo, o la persona del Espíritu Santo.
Tu puedes hablar a un pedazo de madera por tallado que esté, o a un pedazo de oro o plata tallados, pero nada sucederá; en cambio hablas a Jesucristo, estás hablando con una persona divina, que ha prometido escucharte y responderte; siempre te dirá es Mi privilegio.
De qué forma lo toma Jesús, pues estás hablando de tu espíritu a Jesús quien es Espíritu pero tiene un cuerpo glorificado, como lo tendrás tu un día; recuerda que el fue Hombre verdaderamente; El vive en ti y está en los cielos, porque eres espíritu por excelencia puede suceder esto; dice Efesios 1:10 “De reunir todas las cosas en Cristo … así las que están en los cielos, como las que están en la tierra”. Están reunidas en Cristo, y El vive en ti; que recibas sabiduría y revelación, y los ojos de tu entendimiento sean alumbrados, para que sepas lo que has recibido.
Cuando tu entiendes plenamente que Jesús es Señor, entonces entiendes la forma en que tu también puedes señorear, en Génesis Dios Padre bendijo al hombre diciendo: “Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y SEÑOREAD …” sobre todo lo creado. Mientras alguien no tiene a Jesucristo en su vida, sufre la consecuencia que Satanás es el dios y señor de este mundo, Adán lo coronó como tal, pero cuando sales de ese señorío de tinieblas y entras al Señorío de la luz de Jesús, tu puedes señorear como El lo hace, Su Reino es Reino de luz y es tu Reino ahora, y el Rey vive en ti, El Señor vive en ti.
Señorea tú con confianza, en la confianza y la seguridad que Tu Señor Jesús te da, y en la seguridad que vive en ti. Mientras no veas a Jesús como la persona divina del Hijo del Dios viviente, no es fácil, pero de ahora en adelante, esto es pan comido para ti. El que es señor, no tiene temor, no tiene culpa de nada, no acepta la maldad, señorea y gobierna conforme a los principios de su Reino, y agrada a su Señor, y su gozo es estar sometido a la autoridad de su Señor, porque El es la fuente de esa autoridad inherente ahora a quien es señor en la tierra y sobre todo lo creado, su labor es sujetar a Satanás bajo sus pies, porque esta bestia sufre de amnesia y olvida que tu eres un más que vencedor, pero la Palabra en tu boca se lo recordará siempre.
En la cruz Jesús clavó todo decreto que este malvado tenía contra nosotros, y en su cuerpo en el madero sufrió toda maldición para nosotros ser libres para reinar como reyes, y señorear como señores, y lo más hermoso alabar y adorar a nuestro Dios y Padre, a Jesucristo el autor de eterna salvación, autor de la vida, y autor y consumador de la fe; y al Espíritu Santo; porque tanto el Hijo como el Espíritu Santo le dan toda la gloria al Padre.
Jesús amado, hay un cántico que dice: “hay momentos que no deberían terminar, hay segundos que debían ser eternidad” así es cuando entendemos Tu presencia y Tu gloria es tan palpable, entonces conocemos de Tu Señorío y Tu Reinado de luz y de verdad.

Jesucristo - parte 3


Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe – Hebreos 12:2
Es en la persona de Jesús que debes poner firme tus ojos, porque de El mana la vida y sólo en El hay Rhemas de vida eterna. Es como el atleta que llegará a la meta, o el jugador que meterá el gol, o el que encestará el punto en el basket, debe mantener sus ojos fijos en aquello que lo hará triunfar. Así tu mantén tus ojos en la persona de Jesús, no es que te hará triunfar, ya te hizo “más que vencedor”; pero esto se dará y se ejecutará sólo si eres sabio y mantienes tus ojos en El.
Hay un dicho loco quizás, pero dice así: “donde pongo el ojo, pongo la bala”, pues “ten tus ojos puestos en Jesús, y la bala está lista para el enemigo”. El diablo no se meterá contigo, si no le haces caso a él ni a sus demonios. Jesús nos dio el ejemplo, trató al diablo, como diablo malo, aún cuando tenía cierta razón éste (porque Adán le cedió el señorío que Dios le dio al hombre), en el tiempo de la tentación; Jesús no se dejó tentar. Porque Su triunfo estaba en que amaba hacer y oír la voluntad del Padre.
Cualquier cosa que suceda en tu vida, cuestiones de soledad, tristeza, menosprecio, persecución, insultos por causa de la Palabra, o aún si porque cometiste errores, PON TUS OJOS EN JESUS, El te ayudará recordándote que Su paz, Su gozo te han sido dados, y puedes andar en esta tierra como El anduvo, sin temores, sin miedos, al diablo le dijo: ¡ah eres tú, vete!.
Recuerden que un día los demonios le dijeron “has venido para destruirnos” Marcos 1:24, siempre respondo: Sí bobos, para eso vino mi Jesús. “Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer, desatar, anular, volver a cero las obras del diablo” I Juan 3:8. Más te vale que sepas que Jesús vive en ti, y que para esto mismo apareces tú, donde aparezcas.
Amados, Jesús hombre no hubiese tenido éxito en esta tierra, y no hubiese cumplido Su meta si no hubiese estado tan unido al Padre, y toda Su mirada, todo Su pensar, todo Su oír era el Padre, siempre dijo: el Padre y Yo uno somos, me ven a Mí ven al Padre, me conocen a Mi conocen al Padre. Pablo dijo: “Sed imitadores de mi, así como yo de Cristo” – I Corintios 11:1; amados podemos decir lo mismo, refleja a Jesús, porque tu lo ves siempre, tus ojos están en El, sólo en El.
Esta es la clave de tu éxito, verlo a El, vivir por El, amarlo a El, no me cansaré de repetirlo: ama a Jesús con todo tu ser, con todo tu corazón, mantente agradecido al Señor de tu salvación, a Tu redentor, a Tu sanador, al que prospera tu vida, tus finanzas, tu familia y todo lo que pides en Su Nombre al Padre es tuyo, es sí y amén.
Jesús un día te recibí, abrí la puerta de mi vida y te dije Eres mi Señor, Eres mi Rey, y despedí a Satanás de mi vida; e inmediatamente me diste un nuevo espíritu y un nuevo corazón; me diste Tu Nombre al lavarme con Tu sangre preciosa, creí que el Padre te resucitó con el poder del Espíritu Santo, y fui declarado justo; así me convertiste en una nueva criatura, gracias, muchas gracias!!!.

Jesucristo - parte 2


… ¿Esto os ofende? ¿queréis acaso iros también vosotros? Le respondió Simon Pedro: Señor ¿a quién iremos? Tú tienes palabras (rhemas) de vida eterna. Y nosotros hemos creído y conocemos que Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente – Juan 6:61,67-69
Es importante amados, amar y no ofenderse sobre todo con nuestro Padre, con Jesucristo o con el Espíritu Santo. La gente generalmente rápido se ofende y pone el dedo contra Dios – por eso la gran expresión que amo: “NO CULPE A DIOS” de diferentes maneras insultan, culpan a Jesús, y pronto desconfían de El y Su Palabra, dicen: es que la Palabra no se cumple Qué ofensa mi Padre y eso sale de sus corazones porque están ofendidos.
La ofensa viene por no creer, y entonces se echa la culpa a otro, por ignorancia, por falta de amor al otro, y entendamos que no cambiamos: “porque somos egoístas y no amamos en el amor de Dios, ni a Dios ni a otros”.
Ahora Jesús tenía todos los motivos y móviles para ofenderse, miren todo lo que hacían los Fariseos, Saduceos, Herodianos y todos los feos, contra Jesús, pero el éxito de Jesús fue tener todo Su ser en el Padre, nunca olvidar su meta por la cual vino a la tierra, y jamás olvidar su posición como Hijo y Su posesión dada por el Padre, y es más dice la Palabra en Hebreos “Por el gozo puesto delante de El” siempre vio a hombres salvos, sanos y prósperos, nunca vio hombres ofendiéndole.
El propósito de tocar esto es que jamás te ofendas con Jesús, con la Palabra, con tu alimento diario, con el Pan de los hijos, con lo que te trae fe, con lo que cambia tu vida y a los tuyos; ama a Jesucristo con todo tu corazón, con todas tus fuerzas, con toda tu mente, jamás algo en tu vida será de tanto sacrificio, que no merezca dejarlo por amor a Jesús, El hizo lo máximo por ti, lo que nadie podía hacer. En verdad Jesús es el héroe por excelencia, sin tener que hacerle monumentos terrestres, debería tener el primer lugar en tu corazón.
Sólo pensar en El, sólo alabarlo, y cantarle con dulzura, diluye tu ser. Saber que es tu abogado fiel por siempre, Tu defensor, Tu intercesor, debe causar algo maravilloso en ti, para amarle aún más.
Pedro a veces tenía respuestas sabias, como esta de ¿a quién iremos? Y dio el motivo real, “sólo Tú tienes Rhemas de vida eterna” y sabemos Quién eres.
Nunca ofendan a Jesús ni con el pensamiento, El vive en ti, no hay razón para obviarlo y vivir una vida desgraciada, cuando Su gracia te basta.
Jesús nadie como Tú para amarme y amarte, para serte grato y agradecido todos los segundos de mi vida, para honrarte con todos mis hechos, y dar un testimonio que te haga sentir qué bueno que lo salvé, qué bueno que di Mi vida por éste, qué bueno que no pisotea Mi sangre, que bueno que no puedo avergonzarme de El, como él/ella no se avergüenza de Mi en ningún Lugar.

Jesucristo - parte 1


… y llamarás Su Nombre JESUS, porque El salvará a Su pueblo de sus pecados – Mateo 1:21
Es lo supremo, lo sobrenatural, la excelencia, en Isaías 9:6 “ … y se llamará Su Nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz.
Admirable porque todos los que lo vieron se admiraron de Su persona, dice la Palabra que iba haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con El, Hechos 10:38
Consejero, Jesús tenía tan sana doctrina que hasta los más doctos y eruditos en leyes se quedaban atónitos, hablaba con autoridad y sanaba con Su sola Palabra, el consejo de Dios en Jesús fue la medicina, y la redención de la humanidad. Los Fariseos, Saduceos, Herodianos preguntaban y qué dices tú, y Su consejo fue lleno de compasión, de misericordia de perdón. El dijo a la mujer adúltera, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ni Yo te condeno, vete y no peques más. Un leproso dijo: Si quieres puedes sanarme, El dijo: ¡claro que quiero! ¡Sé limpio!. No usaba muchas palabras, pero las pocas que usó fueron más que suficiente.
Dios fuerte, Jesús fue el Hijo del Hombre y siempre fue y es Dios, es Dios Hijo, que pudo cargar todo pecado, se hizo maldición por nosotros al colgar Su cuerpo en el madero, dio Su sangre preciosa y entró al imperio de la muerte para vencer a la muerte - puede dar la victoria donde sólo hay derrota, puede hacer más que vencedor al que está vencido.
Padre eterno, Jesús vino a mostrar al Padre, dijo el que me ha visto a Mi, ha visto al Padre, ¿cómo dices muéstranos al Padre?. ¿No crees que Yo soy en el Padre y el Padre en Mí? Las Palabras que Yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en Mi, El hace las obras. Juan 14:9,10 Hay una unidad tal entre el Padre y el Hijo.
Príncipe de Paz, Jesús dijo Mi paz os dejo, Mi paz os doy, no como el mundo la da, así Yo os la doy. Y en Isaías dice, que “el castigo de nuestra paz fue sobre El”, no tienes un por qué perder la paz ahora, porque El llevó tu falta de paz. ¡El es tu Shalom!
Jesús, precioso Nombre porque El salvará a Su pueblo de sus pecados, es el Redentor Hombre, y el Redentor divino, se hizo hombre para realizar la obra que ningún otro podía hacerla.
Le fue dado un Nombre que es sobre todo nombre, Jesucristo ante este Nombre toda lengua confesará que Jesucristo es el Señor, y toda rodilla se doblará de todo lo que está en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra, ¡JESUCRISTO ES SEÑOR POR SIEMPRE!!
Padre Celestial acepto todo Tu amor mostrado en Tu dar, es por eso que amo tanto a Jesús el don de vida eterna, la luz verdadera, el camino y la verdad, gracias porque sólo Jesús pudo llevarme a Ti mi Padre celestial, y puedo amarte como Jesús te ama..

El Padre - parte 4


Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos ABBA PADRE – Romanos 8:15
Esto es Papito, en toda la confianza con que el Hijo nos ingresó a la presencia del Padre, y fuimos en Jesús hechos aceptos en el amado nos dice Efesios 1:5 “… para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo …” y el vr. 6 “para alabanza de la gloria de Su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado”.
En Marcos 14:36 “Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti; aparta de Mi esta copa; mas no lo que Yo quiero sino lo que Tu” Así trataba el Hijo al Padre, a la vez que Jesús amaba la voluntad del Padre. Hubiese no querido como Hombre pasar la cruz, pero era la voluntad del Padre, y por eso buscó, vio el gozo del Padre puesto delante de El, la salvación del hombre creado.
Ahora, el unirnos al Padre por la sangre de Jesús, nos separa del mundo, y debemos estar seguros en nuestras vidas de vivir realmente para amar a nuestro Padre.
En I Juan 1:15,16 dice: “No améis
· al mundo,
· ni las cosas que están en el mundo.
Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque:
· todo lo que hay en el mundo,
· los deseos de la carne,
· los deseos de los ojos,
· y la vanagloria de la vida,
NO provienen del Padre, sino del mundo
Amados hay una separación total entre el amor del Padre y las cosas de este mundo. Nunca volveremos a crucificar a Jesús, tampoco menospreciemos Su sacrificio y Su sangre que nos limpió y nos separó de la habilidad de pecar, no hagamos lo que el perro, dice que el perro vuelve a su vómito, amados nosotros somos hijos, comportémonos como tales todo el tiempo. Nos ha sido dado el poder para hacerlo.
El amor del Padre es tan grande, que es tiempo que lo veamos y lo gocemos abierta, plenamente y con todo nuestro ser. Y que otros sepan que el Padre está esperando por ellos para amarlos y darles su herencia.
Dios nuestro Padre confía en ti que tu meta es vivir en Su presencia, que tu anhelo es vivir con El para siempre, para alabarle bendecirle y adorarle, y el decirle: El hacer Tu voluntad oh Padre me ha agradado.
Padre Celestial acepto Tu gran amor por mi, y en ese gran amor te amor con todo mi ser, me separaste del mundo y no volveré al mundo, cada día eres mi Abba Padre, siempre elegiré hacer Tu voluntad, me agrada traer gozo a Tu corazón, tal como Tú has traído gozo eterno a mi vida y gracias, muchas gracias en el Nombre de Jesús.

El Padre - parte 3


En la casa de Mi Padre muchas moradas hay … – Juan 14:2
Subo a Mi Padre y a vuestro Padre, a Mi Dios y a vuestro Dios – Juan 20:17
Todo es tan definido en Jesús, su vida, su dar, su ejemplo, transparente, sin duda, sin egoísmo, sin celos. Me hace tan bien tener un Salvador maravilloso y excelente, y por cierto a ti también.
Dios siempre fue el Padre de Jesús, todo el tiempo, aunque hubo un tiempo que tuvo que separarse temporalmente en persona y espacio del Padre cuando se hizo el Hijo del Hombre al nacer en esta tierra, y hubo unas horas de separación total cuando en la cruz cargó el pecado, pecados, maldiciones, enfermedades, dolencias, pobreza de toda la humanidad existente y por venir. Porque el Padre todo lo hizo por amor al hombre creado para ser Su familia.
Es por eso que cuando Jesús resucitó antes de subir a la presencia del Padre, El declara: Subo a Mi Padre y a VUESTRO Padre, a Mi Dios y a vuestro Dios”. Ahora a través del sacrificio consumado de Jesús nuestra posición cambió, por Su sangre, por eso es que al aceptar a Jesús como el Señor de nuestras vidas, estamos aceptando en Jesús, que Dios es nuestro Dios y nuestro Padre.
Amado tienes un Padre celestial, eterno, El es amor. Es una persona con personalidad, sin cambio, todo el tiempo piensa igual de ti. Una vez que eres hijo, piensa de ti como piensa de Jesús.
Podemos vivir seguros como Jesús está tan seguro que el Padre lo ama, y nunca lo dejará, por eso dice el Salmista: Aunque mi padre y madre me dejaren con todo Tu no me dejarás. Un hijo busca seguridad, protección, provisión, un ambiente de amor, de paz, de gozo.
Muchos hijos buscan al Psiquiatra o al Psicólogo en vez de buscar a Su Padre y refugiarse en El, en Su Palabra y en Su amor y sabiduría. Podemos confiar en El, pues El confía en nosotros, El nos salvó, dando lo mejor de El que es Su Hijo Jesucristo, ¿cómo no confiar en El?.
Y Jesús quiere que donde El está nosotros estemos, porque el Padre ha preparado muchas moradas para cada uno de nosotros. Es el arquitecto supremo, es el médico divino, es el PADRE POR EXCELENCIA.
En Isaías 63:16 dice: “Pero Tú eres nuestro Padre, si bien Abraham nos ignora, e Israel no nos conoce. Tú, oh Jehová, eres nuestro Padre; nuestro Redentor perpetuo es Tu Nombre
Y en Isaías 64:8 dice: “Ahora pues, Jehová Tú eres nuestro Padre, nosotros barro y Tú el que nos formaste, así que obra de Tus manos somos todos nosotros
Jesucristo gracias por aquel día que decretaste: voy a Mi Padre y a vuestro Padre; te amo Jesús y estoy tan agradecido, que todo lo hiciste con tanto amor y con tanta verdad, nos devolviste al Padre, aunque te costó la vida, eso es amor.

El Padre - parte 2


Felipe le dijo: Señor muéstranos al Padre. Jesús le dijo: … el que me ha visto a Mí ha visto al Padre – Juan 14:8,9
El motivo más grande y único por el que Jesús fue enviado del Padre fue para restaurar el camino, la verdad y la vida al Padre; para que tengamos la clase de vida del Padre, la clase de fe del Padre, la verdad del Padre; y Jesús restauró ese camino “Por el camino nuevo y vivo que El nos abrió a través del velo, esto es, de Su carne” Hebreos 10:20
En el Antiguo Testamento dice en Génesis 3:24 “Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del Huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida”.
¿Cómo llegamos al Padre entonces? Por el camino nuevo y vivo que trazó Jesucristo: y el motivo es unir el hombre a Dios para que lo adore en espíritu y en verdad, para que esa relación y comunión para lo cual fue creado el hombre sea restablecida, pero ahora a través de un pacto, para recibir la promesa de la herencia eterna que el Padre en su sola voluntad preparó para nosotros; y esto no conllevaba muerte sino vida eterna. En Hebreos 7:22 y 8:15 dice: “Jesús es mediador y fiador de un mejor y nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna”.
La sangre del Hijo unigénito lavó sin retorno, todas las transgresiones por las cuales la ley en el antiguo pacto daba por muerto y perdido al hombre para siempre “porque la paga del pecado es muerte”. Y aún los que habían muerto en la esperanza del Hijo de Dios, Quien un día los redimiría plenamente; porque los sacrificios que ofrecieron de toros y machos cabríos o tórtolas cubría sus pecados pero no los desarraigaba, hasta el día que Jesús tuvo que descender a las partes más bajas de la tierra y predicó las buenas nuevas; hay buenas nuevas por causa de la sangre preciosa de Jesús que borra pecados, entonces pudo llevar cautiva la cautividad, esto es a los que estaban en el seno de Abraham.
Porque éstos murieron en la esperanza perfecta de: “Yo sé que mi Redentor vive, y al fin se levantará sobre el polvo; y después de desecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios, al cual veré por mí mismo, y mis ojos lo verán y no otro” Job 19:25-27. Así fue Job y los muchos que habían vivido en esta tierra creyendo que algún día verían a Dios, vieron al que traspasaron en la cruz, esto es a Jesús. Y el camino trazado al cielo fue primeramente para ellos. Amados nosotros gozamos esta verdadera vida que fue entregada a través de un sacrificio, del fiel y verdadero.
Jesucristo gracias por ser el camino al Padre, gracias por la vida y la verdad, todo se cumplió en Ti, porque con tu obediencia todo el plan del Padre fue hecho posible.

El Padre - parte 1


… nadie viene al Padre sino es por Mi – Juan 14:6
¿Quién es Aquel por MI? Es Jesús, el unigénito, el primogénito, Hijo de Dios. Observen que estamos hablando de personas acá, del Padre y del Hijo en forma muy personal.
En el Antiguo Testamento Dios dio a Su pueblo padres para que mirando ese ejemplo, puedan recibir las promesas, y no sólo esto, sino para que sientan y sepan que tienen raíces, no era cuestión de hablar de un Creador solamente, sino de las raíces del hombre y sus ancestros, esa es la vida, de qué línea venimos.
Veamos algo un poco controversial y gracioso a la vez, la historia, la verdad de la vida lo escribe, lo data así, una madre es muy importante para un hijo, y hasta la literatura fina la nombra así: “madre hay una sola, nadie como ella en su amor”, no se dice esto del padre; pero qué importante es un padre para un hijo, si no conoció al padre se siente un ovni, si el padre no lo reconoció (y no es cuestión de firma ahora) se siente un desahuciado, si el padre no lo amó, pues a lo macho es un cobrador de la vida y hará igual con sus hijos, ¿se dan cuenta, todo el triste futuro que entrelaza el “no haber tenido padre”?. Qué controversial, no causa nada de esto el no haber tenido madre, o figura de madre, si murió hay que llevarle flores, si no está la muy bandida se fugó.
Los Israelitas a través de los Fariseos frotaron las narices de Jesús, con su padre Abraham, padre Isaac, padre Jacob, como ninguna otra raza a éstos no les faltó ni falta padres, qué orgullo verdad? Mientras que los gentiles, su lema es “se busca, y no se encuentra”.
Lo mejor de toda la historia humana desde la creación es que Dios no entregó a Adán una familia desmembrada, una religión de dioses ciegos y mudos de madera o de metal, o una relación dislocada, Dios entregó a Adán el poder para levantar una familia de Dios en esta tierra completamente santa, justa, sabia e inteligente, bendecida, fructificadora, multiplicadora, sojuzgadora, y que sean señores en esta tierra, esta familia tenía al mejor Padre del universo y ese alguien es DIOS PADRE, el Adonai, el Shaddai, el Gran Yo Soy.
Es Dios quien dio padres a Israel, para que éstos vuelvan al original de reconocer a un padre, qué bueno es Dios en toda su paciencia para enseñar al hombre y regresarlo a ganar lo perdido, bajo ese precioso libre albedrío que Dios colocó en el hombre al crearlo. Dios hizo al hombre libre y lo quiere libre. Sólo que el hombre puede salir de la esclavitud - tinieblas en que fue ingresado por la traición de Adán, y regresar a esa libertad real a través de Jesucristo Quien lo lleva a su Padre verdadero, quitando de en medio al suplantador.
Jesucristo gracias por ser el camino al Padre, gracias por todo Tu sacrificio en la cruz, el cual anuló, abolió el camino que el diablo había trazado con traición y engaño para convertirse en el padre perverso de la humanidad, gracias porque ahora conocemos a nuestro Padre celestial en todo Su amor y cuidado para con nosotros, y esto tanto para judíos como para gentiles, gloria a Dios!

Cambio de Mando


En un momento en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta – I Corintios 15:52
En los Estados Unidos de Norteamérica se daba la Ceremonia de Cambio de Mando, se veía al Sr. Bush, así como al Sr. Obama (Enero 2009); uno entregando el mando, y el otro tomando el mando por el período de 4 años. Hubo cantidad de gente, parecía un mar de gente, llenos de alegría, de expectativa, cargados de pensamientos de cambio y felicidad. Se oyó trompetas al momento del ingreso del Sr. Obama, mucha música, aplausos y ovación. Un gran día para Norteamérica y oramos por ellos y nos gozamos con ellos, y creemos en Dios que será un tiempo grandioso en que esta familia mostrará la sabiduría y el amor de Dios a esta nación y al mundo.
Mientras se veía en este tiempo estos grandiosos sucesos en el mundo entero a través de la tecnología de punta, yo podía mirar la Palabra y entender en el espíritu también, directamente del Espíritu de Dios que nos guía a toda la verdad y nos muestra las cosas que van a venir; se acerca galopante el día que escucharemos la final trompeta amados, y el Fiel y el Verdadero el Salvador del mundo aparecerá y todo ojo lo verá, y dirá “SUBE ACÁ” pero no todos serán llevados con El; esto no es todo llega el FIN donde el Juez Supremo juzgará a todos (no se habla de la Iglesia, del Cuerpo de Cristo) los que rechazaron a Cristo como su Salvador personal. La Iglesia de Cristo Jesús entregando el mando a Su Rey y Señor; y aquellos que creyeron tener el dominio del mundo con su dios Satanás, abrirán los ojos y sabrán ya muy tarde que su dominio fue falso, temporal, vano.
Quiero ya ver ese mar de gente con las manos levantadas adorando al Rey de reyes y Señor de señores, dando la gloria y la honra frente a frente al Cordero de Dios, y rindiendo honor al Padre de amor.
Pero a la vez necesitamos trabajar para que en ese mar de gente, estén los muchos que nosotros trajimos al Señor. No nos cansemos de hacer el bien, no nos cansemos de predicar, no nos cansemos de enseñar, el Espíritu Santo es fiel para obrar y ejecutar en la Palabra que nosotros soltamos; seamos sabios y prudentes. No hagamos caso de la voz del enemigo, sus artimañas y maquinaciones para detener el Evangelio de la Paz, seamos los que predicamos a tiempo y fuera de tiempo, porque la Palabra no está presa.
Imagínense el momento final, el sonido de la trompeta, o la voz de trompeta de Jesús, y nosotros Su iglesia con mucha expectativa de por fin ver al invisible, de por fin adorarle por siempre, de por fin dejar este mundo, y conocer en su plenitud la grandeza de Dios, la grandeza de todo lo preparado para nosotros. No sólo vivan el hoy, y un corto mañana, hay un futuro real y eterno amados. Aliéntense por favor. El hoy es glorioso pero hay una gloria mayor aún.
Padre Celestial gracias porque no estamos en tinieblas, para que ese día nos sorprenda como ladrón. Somos hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas; por tanto no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios, vestidos con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo; en el Nombre de Jesús. I Ts.5:5-8

Dónde estás tú?


Mas Jehová llamó al hombre y le dijo ¿dónde estás tú? – Génesis 3:9
Dios hablando a Adán, hace la pregunta ¿dónde estas? y por primera vez en la historia de la humanidad la respuesta es “oí Tu voz en el huerto y tuve miedo” es el inicio del temor, el miedo y la cobardía del hombre. Cuanta gente actualmente no puede responder a la voz de su Dios, de su Salvador, porque están escondidos en el miedo, en el orgullo, en la rebeldía, por el espíritu de pecado y de muerte que reina en ellos; viven en la tierra que Dios creó, pero no tienen la capacidad para responder.
Esto es refiriéndonos al mundo sin Dios; y refiriéndonos a los que conocemos salvación, cuántos de nosotros no tenemos la habilidad de escuchar la voz del Espíritu Santo para responder a El. Estamos duros como encementados, no respondemos a la unción – porque tenemos miedo; no respondemos a todo lo que el Padre nos ha dado en Jesucristo el regalo divino porque ignoramos; no respondemos a la voz de Su Palabra porque por haraganes ni sabemos lo que dice la Palabra; no respondemos a Su voz audible porque creemos que es del diablo; no hemos dado tiempo para conocer algo de nuestro Dios y Padre.
Si la pregunta para el mundo en general es ¿dónde estás? Para que entiendan que el lugar en que están fue creado por Dios, tal cómo Adán estaba en el Huerto del Edén de Dios, y ya lo había olvidado, había cortado su relación y comunión con Su Dios; y estaba deshabilitado para volver a conectarse, ahora necesitaba un Salvador; así está el mundo amados, necesita a un hijo de Dios en esta tierra, para que alguien le presente al Salvador y volver a conectarse con su Dios, pero si tu no estás preparado para ser uno que transfiere la salvación y el conocimiento de la Palabra, ¿cómo lo harás? Creo que es tiempo de dejarnos de perezas e ignorancias y meternos de lleno a la Palabra, nadar en ella, y hacer que otros hagan lo mismo.
Si la pregunta para el pueblo de Dios es ¿dónde estás? Que conoces a Dios como tu Dios, pero NO como tu Padre, ¿dónde estás? Que conoces a Jesús como el hijo de José y María, pero no como el Hijo de Dios, aquel que fue enviado del Padre no sólo para salvar sino para dar a conocer al Padre; el Salvador, el Sanador y Prosperador, el Libertador, por cuya sangre preciosa te conviertes en hijo de Pacto , tal como El y el Padre; el que traslada de las tinieblas de la ignorancia a la luz admirable del Reino de luz; y viene lo peor no conocen al Espíritu Santo, es un fantasma, hablo al pueblo de Dios que ya debería ser el Reino de Dios, con mentalidad de Reino claro está; enseñaba ayer el Maestro, el Espíritu Santo a la Iglesia acerca de la mujer Griega o Sirofenicia o Cananea, esta mujer vino a Jesús reconociendo que era el único que podía librar a su hija de ese demonio que la atormentaba gravemente (Mateo 15:21), y Jesús la trata como lo que es, le dice que el pan de los hijos es para los hijos, no para los perrillos, el triunfo de esta mujer está en que NO se ofendió ante la verdad descubierta, vino con un segundo propósito y era pasar de perrilla a hija – gloria a Dios, que tal osadía; y lo logró, finalmente Jesús la declara: (1) mujer grande es tu fe (2) hágase contigo como quieres.
Esto es, tu osadía te trajo a Mi, declarando Quien soy (Mateo 15:22) y que puedo tener misericordia, ahí lo tienes; sólo una hija tiene la clase de fe de Dios de Su Padre; por lo tanto su generación puede gozar de lo que ella tiene; ahora también puede participar del PAN DE LOS HIJOS; Jesús la trasladó por Su osadía de saber Quién es El, y dónde está El, de perrilla y migas de pan, a hija y pan de los hijos.
Esto es lo que debemos transferir, el PAN DE LOS HIJOS, y este pan es la unción que nos da el poder para hacer mayores cosas aún de las que habló Jesús en Juan 14. Esto es el Espíritu Santo de Dios dado a nosotros, lo que Jesús dijo: les conviene que me vaya para que venga el Consolador, el Guía a toda la verdad. Más conocimiento de la Palabra, de la Verdad la unción será mayor también.
Los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos somos hijos de Dios – y clamamos ABBA PADRE - Romanos 8:14,15
Padre Celestial hoy nosotros podemos responder AQUÍ ESTOY, no tienes que buscarme, ya me hallaste por lo tanto osadamente puedo hacer en el Nombre de Jesús todo aquello que te agrada, y compartir el Pan de los Hijos.

Dónde está tu meta? parte 4


Padre si quieres pasa de Mí esta copa, mas no se haga mi voluntad sino la Tuya – Lucas 22:42
Cuando Jesús iba camino a la cruz, él no vio la cruz, ni la traición que iba a sufrir, ni las injusticias, ni el juicio ilegal que sufriría frente a sus escarnecedores, ni que lo condenarían siendo inocente, ni siquiera la muerte, ni la tumba, sino el gozo que siente cada vez que un pecador se arrepiente. “Vale las fuerzas que usas, voy a aguantar todo eso por él”.
Ahora El te pide que hagas lo mismo, que aguantes, soportes todo lo que sea necesario por estar con El; puesto que no lo soportarás solo sino con El. Así como Él puso su mirada en ti, Hebreos 12:2 dice “por el gozo (eres tu) puesto delante de El, sufrió la cruz, menospreciando el oprobio” así quiere que la pongas en Él ahora. Así te dejen solo, te vituperen, te persigan e insulten, se burlen, te critiquen, no te rindas nunca. Pon tu mirada en el galardón, en el invisible, esperando que un día te llamen y puedas decir: “me costó, fue duro, pero he venido contigo y no estuve solo nunca, ni un minuto”.
Pablo decía: “Nada me va a separar del amor de Dios, ni lo alto, ni lo bajo, ni principados, ni potestades, nada me va a separar del amor en Cristo Jesús”. Habrá gente que te pueda traicionar, habrán pruebas y tentaciones que el enemigo te ponga para pisar el palito, cosas de egipcios que debes dejar, pecados que debes abandonar, pero es tan fácil dejarlo cuando pones la vista allá arriba: Puestos tus ojos en Jesús, el que inicia y acaba o perfecciona tu fe.
Quiero que veas en tu espíritu esto: que imagines el día que te pares delante de Jesús. Que cierres tus ojos y en este momento te imagines en el cielo, que te veas delante de Jesús, no tengas temor a imaginarlo. Ahí estando delante de El, ¿qué es lo que tú crees que El te dice? Y ¿qué es lo que quisieras decirle? Pon tu mira, tu vista en el cielo y mirándolo a El, allí quiero que hables como que este fuera el momento real, hasta que todo tu ser llegue a estar en ese lugar. ¿Qué le dirías a Jesús si estuviera frente a ti?.
Cuando estás muy interesado en el precio, no estas interesado en la ganancia. El problema no consiste en pagar el precio, consiste en las ganas que tengo de ganar, ponle ganas entonces a TU META.
Padre gracias por ayudarme a poner toda mi mirada, todo mi ser, todas mis fuerzas en Jesús Tu Hijo amado, en El soy más que vencedor, en El soy victorioso, no voy tras la victoria, estoy en el lugar de la victoria, soy lo que soy en El.