El poder de decidir


Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad sino la tuya – Lucas 22:42
Esta fue una decisión por la redención de la humanidad entera.
Pero, oh qué gozo vivir un nuevo día, lleno de luz dentro de ti y fuera de ti, alegría, paz, que puedes compartir con muchos otros. Vivir un día con todas sus circunstancias, y sus problemas, pero que la solución salga de ti, por causa que Jesús vive en ti, Aquel que decidió por tu vida y salvación. Tu decisión hará que al final de ese día sea contado como un día de victoria o de derrota. Cada día decidimos por vida o por muerte.
Qué poder nos ha dado Dios, "el poder de decidir", hoy tú decides ser mediocre o el mejor Campeón del Universo, hoy tú decides ser sabio y empaparte de la Palabra de Dios, hoy tú decides hacer de este día un escalón de fe para subir en todas las áreas de tu vida, hoy tú decides comprometerte con Dios más y más, hoy tú decides vivir sano y próspero por siempre! HOY TU LO DECIDES! y el HOY es cada día de tu vida. El libro de Juan es un libro precioso de amor, léelo y escudríñalo; dice "escudriñad las Escrituras, porque en ellas os parece que tenéis vida eterna"
Todos los personajes que hemos venido escudriñando, estudiando, observando, han dejado en nosotros un sabor de ¡qué campeones! ¡qué privilegio ser los llamados por Dios y ser guiados por el Espíritu Santo! También vimos los del Antiguo Testamento, preciosos cada uno, en medio de las luchas de esta vida, los vemos victoriosos, creyeron a Dios, ante la Palabra que El les daba, perseveraron no desmayaron, no tomaron vacaciones, fueron osados cada día de su vida. Ellos fueron de carne y hueso, tan terrícolas como nosotros, no hay excusa, no hay antigüedad ni historial del pasado que pueda detenernos. En ti como en ellos actúa “El poder que tenemos para decidir”.
¿Recuerdan el éxito de Jesús, dónde radicó? En hacer lo que oyó del Padre, hacer lo que vio hacer al Padre y entonces podía orar; ¡Gracias Padre porque Tu siempre me oyes! claro está que el Padre tenía contentamiento en el Hijo!
Aún en lo natural cuando traes contentamiento al corazón de tu padre o madre, ellos harán todo hasta lo imposible por suplir lo que anhelas, pues tu Padre celestial, también sabe tomar contentamiento sobre ti, hónralo, alábale, adóralo, obedécele, ama Su Palabra, y sigue sus instrucciones.
Creo que si haríamos una encuesta qué es lo más difícil en un cristiano, la respuesta sería “perseverar” y es que la oposición es fuerte, pero somos más que vencedores, Jesús no nos prometió días sin oposición, dijo “en el mundo tendréis aflicción, pero Yo he vencido al mundo”, El es el vencedor y nos hizo más que vencedores. Recuerden que nunca estamos a la defensiva sino a la ofensiva. Somos los que atacamos, no los atacados. Frente a un dolor, a una enfermedad, a una situación que nos parece que la montaña vendrá sobre nosotros, una circunstancia financiera, o cualquier dificultad en la vida, tenemos suficiente Palabra y Poder para atacar y salir victoriosos.
Fuimos creados para tener victoria, para vencer y no para ser vencidos. En verdad amamos la Palabra, el Poder, la fe, nos gusta ser triunfadores, y esto lo logramos con BUENAS DECISIONES.

Dios y Padre gracias por darnos el poder para decidir, nos diste libre albedrío en tu eterno amor, siempre Tu luz, ayuda y discernimiento nos impulse a entender y a decidir conforme a Tu voluntad, a Tu Palabra, lo mejor para nosotros mismos, nos dejamos entrenar para oír bien y ser guiados por el Espíritu Santo, anhelamos decidir lo excelente para nuestras vidas y que nuestros hijos puedan aprender, es sabiduría y gracia que debemos usar; gracias en el Nombre de Jesús.

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