Personaje - Rut
Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y que me aparte de ti, porque a dondequiera que tu fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios – Rut 1:16
Un vistazo al libro de Rut, es precioso en realidad. Trata de:
- Muerte – Vida
- Hambre – Sobreabundancia
- La visita de Dios
- Nombre y herencia de la familia
- Pariente redentor
- Se une uno del pueblo de Dios con una ex-gentil que decidió amar a Dios
- Siembra y cosecha
Toda una familia del pueblo de Dios que eran efrateos de Belén de Judá, por la hambruna de su tierra decide el padre llevar a su esposa y 2 hijos ir a los campos de Moab. Esta decisión de seguro sin consultar a Dios, fue para muerte del esposo y los hijos quienes ya habían tomado esposas de Moab, y quedaron viudas jóvenes juntamente con la madre de ellos llamada Noemí.
Una de ellas Rut decide irse con su suegra, el amor a su Dios la había atraído fuertemente. Y la otra decidió regresar a su pueblo y a sus dioses. Mas Rut dijo a Noemí “sólo la muerte hará separación entre tú y yo”. Y regresaron a Belén de donde nunca debieron salir. El pueblo judío tiene una historia completamente rica en la provisión de Dios sobrenaturalmente, sea en el desierto, sea cuando estaban cautivos en tierras ajenas, o en su propia tierra.
Ahora es la historia de la Iglesia de Jesucristo la que debe impactar nuestras vidas y corazones, para saber la calidad de Dios que tenemos que nunca nos dejará, y siempre es protector y proveedor.
Vemos en el capítulo 2 que Rut recibe un trato preferencial del dueño de los campos en que fue a trabajar, y él le dijo: sé todo el bien que has hecho con tu suegra, después de la muerte de tu marido, y dejándolo todo, familia, pueblo, dioses, haz venido a un pueblo que no conociste antes. Y lean esto que le dice “Jehová recompense tu obra, y tu remuneración sea cumplida de parte de Jehová Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte” y él le dio toda la confianza de un hogar.
Booz era el pariente redentor, en esos tiempos cuando el esposo moría, un pariente cercano debía redimir a la viuda sobre todo si era joven; hubo otro pariente que no estaba dispuesto a redimir a Rut, siguiendo el rito y las costumbres, Booz la redimió, tomando no sólo a Rut, sino también todo lo que pertenecía a Elimelec (papá), Quelión y Mahlón (hijos). Y leamos lo que el pueblo de Belén, los ancianos dijeron a Booz: “Testigos somos. Jehová haga a la mujer que entra en tu casa como a Raquel y Lea, las cuales edificaron la casa de Israel, y tú seas ilustre en Efrata, y seas de renombre en Belén”. Booz tomó a Rut y fue su esposa, y tuvo un hijo, y las vecinas dijeron: “Le ha nacido un hijo a Noemí; y lo llamaron Obed. Este es el padre de Isaí, padre de David”
Rut fue encontrada “mujer virtuosa” que seamos encontradas así también las mujeres, y los varones, sean encontrados enriquecidos, sobreabundantes, sosteniendo cantidad de trabajadores (esto es familias), y que sean hallados dignos de poder casarse y sean los que sostienen su familia, y a muchos otros.
Dios y Padre gracias tratar con nosotros en cuanto a la vida y a la muerte, Tu consejo siempre ha sido “elige pues la vida para que vivas tú y tu descendencia”; luego siembra y cosecha, nombre y herencia - nos quieres sobreabundantes, no escasos; gracias en el Nombre de Jesús.
Un vistazo al libro de Rut, es precioso en realidad. Trata de:
- Muerte – Vida
- Hambre – Sobreabundancia
- La visita de Dios
- Nombre y herencia de la familia
- Pariente redentor
- Se une uno del pueblo de Dios con una ex-gentil que decidió amar a Dios
- Siembra y cosecha
Toda una familia del pueblo de Dios que eran efrateos de Belén de Judá, por la hambruna de su tierra decide el padre llevar a su esposa y 2 hijos ir a los campos de Moab. Esta decisión de seguro sin consultar a Dios, fue para muerte del esposo y los hijos quienes ya habían tomado esposas de Moab, y quedaron viudas jóvenes juntamente con la madre de ellos llamada Noemí.
Una de ellas Rut decide irse con su suegra, el amor a su Dios la había atraído fuertemente. Y la otra decidió regresar a su pueblo y a sus dioses. Mas Rut dijo a Noemí “sólo la muerte hará separación entre tú y yo”. Y regresaron a Belén de donde nunca debieron salir. El pueblo judío tiene una historia completamente rica en la provisión de Dios sobrenaturalmente, sea en el desierto, sea cuando estaban cautivos en tierras ajenas, o en su propia tierra.
Ahora es la historia de la Iglesia de Jesucristo la que debe impactar nuestras vidas y corazones, para saber la calidad de Dios que tenemos que nunca nos dejará, y siempre es protector y proveedor.
Vemos en el capítulo 2 que Rut recibe un trato preferencial del dueño de los campos en que fue a trabajar, y él le dijo: sé todo el bien que has hecho con tu suegra, después de la muerte de tu marido, y dejándolo todo, familia, pueblo, dioses, haz venido a un pueblo que no conociste antes. Y lean esto que le dice “Jehová recompense tu obra, y tu remuneración sea cumplida de parte de Jehová Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte” y él le dio toda la confianza de un hogar.
Booz era el pariente redentor, en esos tiempos cuando el esposo moría, un pariente cercano debía redimir a la viuda sobre todo si era joven; hubo otro pariente que no estaba dispuesto a redimir a Rut, siguiendo el rito y las costumbres, Booz la redimió, tomando no sólo a Rut, sino también todo lo que pertenecía a Elimelec (papá), Quelión y Mahlón (hijos). Y leamos lo que el pueblo de Belén, los ancianos dijeron a Booz: “Testigos somos. Jehová haga a la mujer que entra en tu casa como a Raquel y Lea, las cuales edificaron la casa de Israel, y tú seas ilustre en Efrata, y seas de renombre en Belén”. Booz tomó a Rut y fue su esposa, y tuvo un hijo, y las vecinas dijeron: “Le ha nacido un hijo a Noemí; y lo llamaron Obed. Este es el padre de Isaí, padre de David”
Rut fue encontrada “mujer virtuosa” que seamos encontradas así también las mujeres, y los varones, sean encontrados enriquecidos, sobreabundantes, sosteniendo cantidad de trabajadores (esto es familias), y que sean hallados dignos de poder casarse y sean los que sostienen su familia, y a muchos otros.
Dios y Padre gracias tratar con nosotros en cuanto a la vida y a la muerte, Tu consejo siempre ha sido “elige pues la vida para que vivas tú y tu descendencia”; luego siembra y cosecha, nombre y herencia - nos quieres sobreabundantes, no escasos; gracias en el Nombre de Jesús.
Posted in: on 20 de agosto de 2009 at en 6:22 a. m.