Personaje - Job
Y era aquel varón más grande que todos los orientales – Job 1:3
Dice la Palabra acerca de Job: “hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Más grande que todos los orientales” Dios mismo lo declaraba así. ¿Qué dirá Dios de ti y de mí, podrá soltar el mejor concepto del universo? Tranquilo Dios siempre lo hace, piensa lo mejor de ti y de mi, vivamos conforme El piensa de nosotros.
En Oasis hemos enseñado la Palabra en cuanto a Job, sin teologías ni aledaños, ni historias, tampoco en forma tradicional. No fue Dios quien entregó a Job o permitió a Satanás que hiriera a Job con aquella sarna maligna, tampoco fue Dios el autor intelectual de la perversidad que Satanás hizo al destruir todo lo que tenía y matar a sus hijos. Dice claramente la Palabra en Juan 10:10 “El ladrón ha venido para matar, robar y destruir …” y Jesús dijo “Mas Yo he venido para que tenga vida y la tengan en abundancia” también dice la Palabra en - I Pedro 2:24 “… por Su llaga fuimos sanados” y lo dice también en el Antiguo Testamento en Isaías 53:5; en Exodo dice que es Jehová nuestro sanador ¿imposible confundir personajes y obra verdad?
Amados el temor de lo que vemos, de lo que oímos, mal entendemos. La Palabra dice que POR FE ANDAMOS NO POR VISTA. Alguien me decía: “es que yo percibí, y entendí tal cosa” le dije usted está asumiendo o claramente se lo dijeron, no no, dijo: no me lo dijeron, yo lo entendí así. Uf tengamos cuidado con asumir, por lo que no vimos u oímos; es la palabra la que aclara, declara las cosas. Si no escuchas lo mismo 3 ó 4 veces no lo asumas por favor. Por otro lado hay que reconocer, quién está hablando a nuestra vida, si es el enemigo, cierre las puertas de sus oídos. El temor es un arma terrible del enemigo, quiere anular la fe. Y Job 3:25 dice: “Porque el temor que me espantaba me ha venido, y me ha acontecido lo que YO TEMÍA”
Job es un libro hermoso, para conocer por ejemplo:
- Que Dios ha puesto una cerca alrededor nuestro para protegernos, no la destruyamos. Podemos en la autoridad que nos ha sido dada también en vez de rodear en temor a nuestros hijos, colocar cerca al igual que Dios de la Palabra, de amor, de fe, de buenas amistades, de acción de gracias por ellos.
- No estemos ignorantes de las artimañas, maquinaciones, y argumentos del enemigo; no dejemos que edifique fortalezas dentro de nosotros, de temor, de desánimo, de pesimismo, de angustia, de preocupación, etc. Porque nos ganará y apabullará, y no debemos darle cabida amados, no lo hagan. Llénense de la Palabra, suelten la buena Palabra para sus cónyuges e hijos, y familia toda.
- En medio de todo, Job no escuchó la necedad de su esposa, dijo: “¿aún retienes tu integridad? Maldice a Dios y muérete” – observen ni hay que dudar de dónde vino ese consejo. El enemigo busca una boca para hablar, manos para matar. No estemos ignorantes de sus acusaciones, y fin. Hay mucho más que ver al respecto.
Veamos lo que más puede cautivar nuestra atención son los capítulos 19, 38, 39, 40, 41, 42 transcribiré dos expresiones tremendas de Job en el capítulo 19:25-27 “Yo SE que mi REDENTOR VIVE, y al fin se levantará sobre el polvo; y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios; al cual veré yo mismo, y mis ojos lo verán y no otro … ” y en capítulo final 42:5 “De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven” qué tremendo llegar a esta experiencia con Dios, lejos de la sarna, y de la pérdida, finalmente no dio la gloria, ni dio lugar al diablo; conoció a Dios, y fue extraordinariamente bendecido en su postrer estado más que el primero, leemos en el 42:10 “Y quitó Jehová la aflicción de Job, cuando él hubo orado por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job”. Vivió Job 140 años más y vio a sus hijos, a sus nietos y hasta la cuarta generación, y murió lleno de días. No fue Dios quien le puso la sarna, ni el temor, ni pérdida alguna, fue el diablo. Pero fue Dios quien mantuvo el testimonio de Job limpio, quitó su aflicción, lo bendijo, y multiplicó. Dios es Dios de amor y bendición. Si analizamos las expresiones de Job tanto en el capítulo 19 como el 42 en los cuales habló su futuro en Dios, su bendición, habló como Dios habla de acuerdo con su creador – así le fue hecho. Pero al inicio habló y actúo en temor también le fue hecho. Hay poder en nuestras Palabras, por eso Dios dijo en Deuteronomio 30 “está delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge pues la vida, para que vivas tú y tu descendencia".
Hay un plan y destino de éxito trazado para nuestras vidas, el libre albedrío es para elegir lo mejor o lo peor, más Dios aconseja lo mejor. En verdad el libre albedrío fue dado para elegir la vida, puesto que venimos de Dios; si el hombre elegiría la maldición y la muerte, lo hizo por su propia voluntad no podrá echar la culpa jamás a Dios.
Dios y Padre gracias por pensar bien siempre de nosotros, por elegir lo mejor, lo excelente, ciertamente no sólo eres nuestro creador, sino nuestro Dios y Padre amado; gracias porque la Tu Palabra contiene todo, lo bueno que sucedió y lo malo, para nuestra amonestación, y saber el trato que se da a cada circunstancia; gracias en el Nombre de Jesús.
Dice la Palabra acerca de Job: “hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Más grande que todos los orientales” Dios mismo lo declaraba así. ¿Qué dirá Dios de ti y de mí, podrá soltar el mejor concepto del universo? Tranquilo Dios siempre lo hace, piensa lo mejor de ti y de mi, vivamos conforme El piensa de nosotros.
En Oasis hemos enseñado la Palabra en cuanto a Job, sin teologías ni aledaños, ni historias, tampoco en forma tradicional. No fue Dios quien entregó a Job o permitió a Satanás que hiriera a Job con aquella sarna maligna, tampoco fue Dios el autor intelectual de la perversidad que Satanás hizo al destruir todo lo que tenía y matar a sus hijos. Dice claramente la Palabra en Juan 10:10 “El ladrón ha venido para matar, robar y destruir …” y Jesús dijo “Mas Yo he venido para que tenga vida y la tengan en abundancia” también dice la Palabra en - I Pedro 2:24 “… por Su llaga fuimos sanados” y lo dice también en el Antiguo Testamento en Isaías 53:5; en Exodo dice que es Jehová nuestro sanador ¿imposible confundir personajes y obra verdad?
Amados el temor de lo que vemos, de lo que oímos, mal entendemos. La Palabra dice que POR FE ANDAMOS NO POR VISTA. Alguien me decía: “es que yo percibí, y entendí tal cosa” le dije usted está asumiendo o claramente se lo dijeron, no no, dijo: no me lo dijeron, yo lo entendí así. Uf tengamos cuidado con asumir, por lo que no vimos u oímos; es la palabra la que aclara, declara las cosas. Si no escuchas lo mismo 3 ó 4 veces no lo asumas por favor. Por otro lado hay que reconocer, quién está hablando a nuestra vida, si es el enemigo, cierre las puertas de sus oídos. El temor es un arma terrible del enemigo, quiere anular la fe. Y Job 3:25 dice: “Porque el temor que me espantaba me ha venido, y me ha acontecido lo que YO TEMÍA”
Job es un libro hermoso, para conocer por ejemplo:
- Que Dios ha puesto una cerca alrededor nuestro para protegernos, no la destruyamos. Podemos en la autoridad que nos ha sido dada también en vez de rodear en temor a nuestros hijos, colocar cerca al igual que Dios de la Palabra, de amor, de fe, de buenas amistades, de acción de gracias por ellos.
- No estemos ignorantes de las artimañas, maquinaciones, y argumentos del enemigo; no dejemos que edifique fortalezas dentro de nosotros, de temor, de desánimo, de pesimismo, de angustia, de preocupación, etc. Porque nos ganará y apabullará, y no debemos darle cabida amados, no lo hagan. Llénense de la Palabra, suelten la buena Palabra para sus cónyuges e hijos, y familia toda.
- En medio de todo, Job no escuchó la necedad de su esposa, dijo: “¿aún retienes tu integridad? Maldice a Dios y muérete” – observen ni hay que dudar de dónde vino ese consejo. El enemigo busca una boca para hablar, manos para matar. No estemos ignorantes de sus acusaciones, y fin. Hay mucho más que ver al respecto.
Veamos lo que más puede cautivar nuestra atención son los capítulos 19, 38, 39, 40, 41, 42 transcribiré dos expresiones tremendas de Job en el capítulo 19:25-27 “Yo SE que mi REDENTOR VIVE, y al fin se levantará sobre el polvo; y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios; al cual veré yo mismo, y mis ojos lo verán y no otro … ” y en capítulo final 42:5 “De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven” qué tremendo llegar a esta experiencia con Dios, lejos de la sarna, y de la pérdida, finalmente no dio la gloria, ni dio lugar al diablo; conoció a Dios, y fue extraordinariamente bendecido en su postrer estado más que el primero, leemos en el 42:10 “Y quitó Jehová la aflicción de Job, cuando él hubo orado por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job”. Vivió Job 140 años más y vio a sus hijos, a sus nietos y hasta la cuarta generación, y murió lleno de días. No fue Dios quien le puso la sarna, ni el temor, ni pérdida alguna, fue el diablo. Pero fue Dios quien mantuvo el testimonio de Job limpio, quitó su aflicción, lo bendijo, y multiplicó. Dios es Dios de amor y bendición. Si analizamos las expresiones de Job tanto en el capítulo 19 como el 42 en los cuales habló su futuro en Dios, su bendición, habló como Dios habla de acuerdo con su creador – así le fue hecho. Pero al inicio habló y actúo en temor también le fue hecho. Hay poder en nuestras Palabras, por eso Dios dijo en Deuteronomio 30 “está delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge pues la vida, para que vivas tú y tu descendencia".
Hay un plan y destino de éxito trazado para nuestras vidas, el libre albedrío es para elegir lo mejor o lo peor, más Dios aconseja lo mejor. En verdad el libre albedrío fue dado para elegir la vida, puesto que venimos de Dios; si el hombre elegiría la maldición y la muerte, lo hizo por su propia voluntad no podrá echar la culpa jamás a Dios.
Dios y Padre gracias por pensar bien siempre de nosotros, por elegir lo mejor, lo excelente, ciertamente no sólo eres nuestro creador, sino nuestro Dios y Padre amado; gracias porque la Tu Palabra contiene todo, lo bueno que sucedió y lo malo, para nuestra amonestación, y saber el trato que se da a cada circunstancia; gracias en el Nombre de Jesús.
Posted in: on 26 de agosto de 2009 at en 6:16 a. m.